Fecha de emisión: 16/Nov/96
Director: Dan Riba
Guión: Paul Dini
Reseña de Antonio Monfort
RESUMEN
En el palacio del emperador Spooj, los enemigos de Lobo conspiran para acusarle de no haberse presentado con una de sus presas, un tal Sqweek. Ante lo que el emperador les da permiso para ir a por él y traerle a su presencia.
Mientras, Superman y Lobo siguen siendo prisioneros del Preservador. El Czarniano es continuamente gaseado por sus rabietas pero Superman urde un plan para escapar que da óptimos resultados. Lobo suplica que le libere, y afirma que si no lo hace arrasará la Tierra en cuanto consiga salir de allí. El Hombre de Acero accede a liberarlo a cambio de prometer que le dejará en paz para siempre, tanto a él como a la Tierra.
Por su parte, Lobo y su presa están a punto de escapar, pero el mismísimo Preservador se planta ante ellos y, para pasmo del czarniano, empieza a transformarse en una criatura gigantesca, capaz incluso de plantar cara al letal cazarrecompensas. La aparición de Superman equilibrará la balanza, pero durante la subsiguiente batalla, Lobo abrirá una de las compuertas de la nave y todos serán arrastrados al vacío. El czarniano y Superman aguantan la presión, pero el Preservador es arrastrado hacía un más que probable final en el vacío del espacio.
Finalmente, vemos a Lobo relatando su historia ante Spooj relajado y con sus enemigos convenientemente castigados por el emperador. Superman, por su parte ha llevado a los especímenes del Preservador a la cueva del ártico. La Fortaleza de la Soledad ha nacido.
CRÍTICA
La segunda parte del encontronazo con Lobo se desarrolla casi completamente en el espacio exterior demostrando una vez más que Superman es una creación polifacética, capaz de funcionar bien tanto en ambientes cotidianos como en aquellos puramente de ciencia ficción. Algo de lo que muy pocos personajes pueden presumir. Sin embargo, el episodio se ve lastrado por la profusión de personajes y entornos que no conocemos de nada y que nos son demasiado lejanos como para poder interesarnos, así como algunos puntos del argumento demasiado forzados: la colaboración con Lobo, que no encaja demasiado con el modus operandi del Czarniano, la presencia del dodo como excusa para tener a mano un sol amarillo, la transformación del Preservador en una criatura monstruosa y los descarados homenajes a Star Wars que no está claro si son guiños graciosos o excusa para no desarrollar otros entornos más propios del universo DC.
Por todo ello el capítulo no resulta tan interesante como podría haber sido y en general recuerda más a una versión light de los ambientes propios de los cómics de Lobo que a una historia de ciencia ficción con Superman de protagonista. Tampoco no deja de ser pintoresca la incorporación de los especímenes del Preservador a la recién creada Fortaleza de la Soledad. Bien es cierto que el refugio ártico de Superman siempre ha tenido un punto exótico, lleno de artefactos (y a veces criaturas) imposibles y mayormente alienígenas, pero ese es un extremo que encajaría mejor con una versión al estilo de la edad de plata (Superman All Star, por ejemplo) que con la versión más humana y quizá realista que nos presenta la serie y que vemos en otros episodios. Por el bien de su trabajo en el Planet, esperemos que alimentar a los bichillos no le ocupe a Clark demasiado tiempo.
Puedes comentar esta noticia en nuestra página de Facebook.
No hay comentarios:
Publicar un comentario