RESEÑA DE JUSTICE LEAGUE #35

JUSTICE LEAGUE #35 (Diciembre 2014)

Guión: Geoff Johns

Dibujo: Doug Mahnke, Ivan Reis

Reseña de Antonio Monfort

RESUMEN

Luthor da una rueda de prensa junto a Bruce Wayne donde anuncia su nuevo acuerdo de negocios entre sus dos corporaciones. En realidad, todo es una estrategia de la Liga para conseguir pruebas de la actividad ilegal de Lex y detenerle al primer signo de ésta.

Sin embargo, Luthor no da señales de nada turbio y parece estar totalmente abierto a mostrar a Bruce Wayne cualquier instalación de Lexcorp por secreta que sea. Esta política incluye también el laboratorio donde nació Bizarro, el clon imperfecto de Superman que acompañó a Lex durante la invasión del Sindicato del Crimen. Pero para Batman no es suficiente. Quiere ver el laboratorio privado de Lex. El empresario parece dudar pero finalmente accede. La sorpresa para Bruce es encontrar allí a Lena, la hermana de Lex, enferma desde la adolescencia y alguien a quien Lex no ha conseguido curar.

Pero en ese momento algo ocurre. Un misterioso enmascarado altamente poderoso irrumpe en el laboratorio de Lex causando graves daños y buscando asesinar al empresario. Aquaman es el primer miembro de la Liga en llegar hasta allí, y consigue contenerlo pero en la batalla un acontecimiento que aterra incluso al mismísimo Luthor ha sucedido. El contenedor de algo llamado “Virus Amazo” ha sido dañado y su contenido se ha empezado a extenderse.

CRÍTICA

Nuevo arranque de saga para la Justice League, que no abandona las tramas de fondo que lleva arrastrando, como tampoco abandona las señas de identidad de esta serie en los últimos tiempos; una narración lenta, pero intensa con estupendo desarrollo de los personajes y tramas a largo plazo que mantienen el misterio y te hacen seguir hasta el siguiente capítulo, así como un fantástico dibujo a cargo de Doug Mahnke, una vez más soberbio, ayudado por Ivan Reis, aun más impresionante si cabe pero que aquí pasa a saludar como mucho encargándose de apenas pocas páginas y la cubierta. La mencionada cubierta por cierto, y como ya es habitual en este título, tiene muy poco que ver con el interior.

En el lado menos bueno de la que sigue siendo una de las mejores, si no la mejor, cabecera de la casa en su línea principal está precisamente esta narración tan episódica, tan coral, donde ni siquiera llegamos a ver a todos los miembros de la Liga en acción. En un esquema como este hay que confiar en que el resultado final de como resultado una historia que haya valido la pena seguir durante todo este tiempo.

Veremos con el tiempo si esto ocurre aquí, y de momento nos quedamos con ganas de saber qué ocurre con ese misterioso “virus Amazo” que tan de cabeza trae a Lex y qué tiene que ver con el clásico villano de la Liga.

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