RESEÑA DE CONVERGENCE: SUPERGIRL: MATRIX #1

CONVERGENCE: SUPERGIRL: MATRIX #1 (Junio 2015)

Guión: Keith Giffen

Dibujo: Timothy Green II con tinta de Joseph Silver

Reseña de Antonio Monfort

RESUMEN

En Metropolis, el Lex Luthor clonado que se hace pasar por su propio hijo se aburre. Con la ciudad atrapada y sin un Superman al que intentar liquidar su vida no tiene mucho sentido. Que una masa de protoplasma que que cree ser Supergirl le siga a todas partes no ayuda demasiado. Pero cuando la cúpula cae, Lex sabe que el momento de escapar puede estar cerca y para ello manda a Matrix Supergirl a buscar la tecnología de teleportación que les trajo allí con ayuda de un detector que él mismo ha fabricado.

Pero los combates orquestados por Telos no se lo van a poner fácil y es que Lady Quark y Lord Volt están en Metropolis dispuestos a enfrentarse a esta versión de la joven de acero. Afortunadamente para Matrix, Quark y Volt son cualquier cosa menos un matrimonio bien avenido y parecen estar más interesados en pelear entre ellos que con Supergirl, cuyos poderes además parecen estar muy por encima de sus rivales.

La heroína de protoplasma puede por tanto retomar su plan de localizar la tecnología que quiere Lex, pero completamente harta de oir al científico acaba por destruir el rastreador cayendo demasiado tarde en la cuenta de que eso la condena a quedarse allí con el pedante de Luthor. Supergirl está de mal humor y la súbita aparición de Ambush Bug no va a mejorarlo precisamente.

CRÍTICA

Es un verdadero misterio de esos que ocurren a menudo en DC, el hecho de que teniendo a Keith Giffen y sacando un titulo de Justice League International esta semana, acabe el hombre escribiendo Supergirl. Incomprensible. Pero perplejidades al margen el resultado es evidente. Justice League International no es ni una remota sombra de lo que sugiere su título, mientras que esta Supergirl es sin lugar a dudas de lo más divertido que ha dado Convergence y con mucha diferencia.

Poco importa que este Lex y esta Matrix no se comporten en absoluto como aquellos de los tiempos de la muerte de Superman, no, esto es Keith Giffen en estado puro. Diálogos delirantes, ritmo endiablado y personajes cuya mayor arma es la ironía que despliegan unos contra otros. Lo que debería haber sido Justice League International atascado en este título de Supergirl Matrix y un verdadero soplo de aire fresco entre la abundante mediocridad de Convergence y sus miniseries.

En cuanto al arte, Timothy Green nos presenta un estilo algo desconcertante, anguloso y con poses imposibles para los personajes, pero se las apaña para encajar estupendamente con el tono de la historia que están contando. El resultado no desmerece en absoluto, sino que consigue que la narración sea fluida y siga las premisas que exige un guión rápido y fresco como este. No es Kevin Maguire, pero nos conformaremos.

En conclusión el primer cómic divertido con el que nos hemos topado en Convergence, lo que dice mucho de él y su añorado guionista y muy poco del resto del evento, pero esperemos que excepciones como esta ocurran al menos de vez en cuando.

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