RESEÑA DE SMALLVILLE SEASON 11 #49

SMALLVILLE SEASON 11

ARGO (6ª PARTE, 31/05/2013) 

Guión: Bryan Q. Miller

Dibujo: Daniel HDR (portada Cat Staggs)

Reseña de Javier Olivares Tolosa

Meditando sobre el pasado y el futuro (tanto el suyo como el de la Tierra), Booster y Skeets ven a dos guardias deteniendo violentamente a una joven. Booster interviene y golpea a uno de ellos intentando evitarlo, pero al final recibe una descarga eléctrica y lo noquean. Mientras, Superman y Supergirl sobrevuelan el Amazonas en búsqueda de la reliquia de Argo, hablando del destino, de lo que le costó a él aceptar el suyo. De pronto Kara recibe un disparo de una nave que les dice que se alejen, y Clark comprende que están más cerca de lo que creían de encontrar la tumba de Faora. Kara, enfurecida, lanza visión calorífica sobre la nave y la derriba, pero entre ella y Kal salvan a los pilotos (que siguen disparándoles), y Clark los congela para que no molesten más. Enseguida, Superman y Supergirl se encuentran ante una puerta con el símbolo de Zod.

Al entrar encuentran una ostentosa sala del trono, la que Zod se construyó para cuando gobernara la Tierra. Clark explica que el Zod original y Faora solo querían tener un hijo, un heredero, y al no poder empezaron a experimentar con la genética y el resultado fue Davis Bloome, quien se convertiría después en el monstruo Doomsday. Pero los clones de Zod y Faora que salieron del orbe, sí podían concebir y ella quedó embarazada de él. Cuando Zod la mató por su "traición" a su causa, no sabía que estaba en estado. De ahí que su trono esté justo ante la tumba congelada de Faora: culpabilidad.

La leyenda que explicó Pa-Vel a Superman dice que el niño nonato muerto dentro de Faora se considera sagrado. Concebido por clones kryptonianos bajo un sol amarillo, de haber nacido el niño podría haber tenido la clave a los límites del ADN kryptoniano y las respuestas al por qué de los poderes que desarrollan. Hablando, los dos observan que alguien ha extraído ADN del bebé de Faora. Mientras Kal y Kara se preguntan por qué el gobierno terrícola podría querer algo así, vemos que en las instalaciones del gobierno han usado el ADN, radiación solar y un sujeto de pruebas para crear... a Doomsday.

CRÍTICA

El número de la semana pasada fue absolutamente prescindible, pero ¿éste? Éste ha sido una pasada total. Me encanta cuando algo que sucede en esta colección resuelve alguna de las cagadas de la serie de TV. Porque todos pensamos que la pelea de Clark contra Davis Bloome fue un truño de proporciones épicas, y que se había desaprovechado al personaje de Doomsday. Pero todo hace pensar que aquel Doomsday (Davis Bloome transformado) quizá solo era un proto-Doomsday. Quizá no fuese el auténtico Doomsday, por decirlo así. Ahora vemos que éste, el que aparece al final de estas páginas, podría ser el verdadero monstruo capaz de matar a Superman, y su creación a través del ADN kryptoniano, el gobierno, y en el siglo XXXI, es una interesante vuelta de tuerca a la historia original del villano. Pero solo es una teoría, y al final quizá resulte otra cagada. Esperaremos antes de echar las campanas al vuelo. 

Tanto me ha gustado la historia que hasta el dibujo me ha entrado mejor. Y es que cuando disfrutas de algo, perdonas sus carencias, y el número de esta semana ha tenido muchos más aciertos que errores.

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